La pantalla de tu móvil u ordenador emite luz azul, que está bien durante el día pero puede alterar tu sueño por la noche. La luz azul estimula el cerebro, haciéndole creer que es de día, lo que puede mantenerte despierto si utilizas el dispositivo antes de acostarte.
Aunque algunos estudios sugieren que la luz azul puede afectar al sueño, otros consideran que el impacto es mínimo, sobre todo en pequeñas dosis. No obstante, vale la pena limitar la exposición antes de acostarse, sobre todo si le cuesta conciliar el sueño.
Tu iPhone, iPad y PC con Windows ofrecen una función llamada Night Shift para ajustar la temperatura de color de la pantalla. Muchos dispositivos Android incorporan un filtro de luz azul, y las aplicaciones de terceros también pueden ayudar. A continuación te explicamos cómo controlar la luz azul en tu dispositivo:
1. Utiliza la función Night Shift del iPhone
Night Shift es uno de los métodos más sencillos para reducir la luz azul en un iPhone. Esta función altera automáticamente la temperatura de color de la pantalla a un tono más cálido y amarillento por la noche, lo que ayuda a reducir la fatiga ocular y a conciliar el sueño. Para activar Night Shift, ve a Ajustes > Pantalla y brillo > Night Shift.
Night Shift está integrado en el sistema operativo del iPhone, es fácil de usar y se puede programar automáticamente. Sin embargo, confiere un tono anaranjado al teléfono y puede que no elimine por completo la exposición a la luz azul, sobre todo en entornos poco iluminados.
2. Baja el brillo de la pantalla de tu iPhone
Reducir el brillo de la pantalla de tu iPhone también puede disminuir la cantidad de luz azul emitida. Para ello, desliza el dedo hacia arriba desde la parte inferior de la pantalla para acceder al Centro de control y ajusta el control deslizante del brillo. Aunque se trata de una solución sencilla y rápida, puede resultar incómoda si la pantalla se oscurece demasiado para un uso cómodo.
3. Utilizar filtro de color rojo
Para mitigar la exposición a la luz azul en tu iPhone, considera el uso de un filtro de color rojo. Aunque el filtro Night Shift incluido en el iPhone reduce parte de la luz azul, no la elimina por completo, lo que puede cansar la vista.
Para mejorar la calidad del sueño, es necesario filtrar más la luz azul. Puedes configurar fácilmente un filtro de color rojo siguiendo estos pasos:
- Acceder a "Ajustes"
- Ir a "Accesibilidad
- Vaya a "Pantalla y tamaño del texto".
- Seleccione "Filtros de color".
- Activar el conmutador "Filtros de color
- Optar por "Tinte de color
- Ajuste la barra "Intensidad" al nivel máximo
4. Descarga una aplicación para filtrar la luz azul
Puedes encontrar numerosas aplicaciones de terceros en la App Store diseñadas para reducir la luz azul en tu iPhone. Estas aplicaciones suelen permitir modificar la temperatura de color de la pantalla, establecer un horario para cuando el filtro debe estar activo y proporcionar funciones adicionales.
Ofrecen un control más detallado del filtro de luz azul y pueden adaptarse a las preferencias individuales. Sin embargo, al igual que Night Shift, la mayoría de las aplicaciones requieren una suscripción para acceder a todas las funciones y también pueden alterar los colores de la pantalla.
5. Utiliza la función de inversión inteligente de tu iPhone
Otro método para reducir la luz azul en un iPhone es utilizar la función Smart Invert. Esta función invierte los colores de la pantalla, creando un tono más cálido, que puede ayudar a reducir la emisión de luz azul. Para activar la inversión inteligente, vaya a Ajustes > General > Accesibilidad > Ajustes de pantalla > Invertir colores > Inversión inteligente.
Es fácil de usar y está integrado en el sistema operativo del iPhone. Sin embargo, puede no ser adecuado para todos los usuarios, ya que puede afectar a la legibilidad del texto y plantear problemas con determinadas apps.
6. Abstente de utilizar el iPhone una hora antes de acostarte
Por sencillo que parezca, el método más eficaz para filtrar la luz azul consiste simplemente en abstenerse de utilizar dispositivos electrónicos por la noche.
Evita utilizar el iPhone, el portátil o ver la televisión al menos una hora antes de acostarte. Esta práctica ayuda a mantener los niveles naturales de melatonina en el organismo, lo que favorece un sueño tranquilo.
7. Invierta en gafas con filtro de luz azul
El uso de gafas con filtro de luz azul puede ayudar a reducir la luz azul que llega a los ojos, incluso mientras se utiliza el iPhone. Varios fabricantes ofrecen estas gafas, que pueden llevarse durante el día o por la noche para mejorar la calidad del sueño y aliviar la fatiga ocular.
Existen numerosas falsificaciones de gafas bloqueadoras de la luz azul, que pueden ser perjudiciales. Por lo tanto, asegúrese de adquirirlas de una marca con base científica.
8. Utiliza un protector de pantalla que bloquee la luz azul
Los protectores de pantalla con bloqueo de luz azul son muy solicitados para reducir la exposición a la luz azul. Por algo es nuestro producto más vendido. Mantienen el color y la calidad de la pantalla de su teléfono, son cinco veces más resistentes que los protectores de pantalla de cristal templado tradicionales e incluyen una bandeja aplicadora de fácil aplicación. Confiamos en nuestro producto y ofrecemos una garantía de 12 meses. A la hora de comparar, otros protectores de pantalla pueden resultar difíciles de aplicar y no ofrecer tanta protección de pantalla como los tradicionales.
¿Afecta la luz azul a su salud?
La exposición a la luz azul durante el día es beneficiosa, ya que ayuda a mantener el estado de alerta, la función cognitiva y regula el ritmo circadiano, el reloj interno que dicta nuestros ciclos de sueño y vigilia.
Sin embargo, la exposición a la luz azul por la noche puede alterar este ritmo y provocar trastornos del sueño. Un efecto significativo de la exposición nocturna a la luz azul es la supresión de la producción de melatonina, una hormona crucial para inducir el sueño.
Más allá del sueño, las alteraciones del ritmo circadiano tienen implicaciones más amplias para la salud. Las alteraciones crónicas pueden contribuir al desarrollo del cáncer, a problemas cardiovasculares, digestivos, reproductivos, del estado de ánimo y otros. Además, la exposición a la luz azul puede acelerar el envejecimiento de la piel, como demuestran los estudios que la relacionan con la hiperpigmentación y el envejecimiento prematuro de la piel.